Solitudes desiertas

La distancia respectiva, los hechos correspondientes, un trabajo que repone espíritus y un viaje en tercera persona, se conjugan para parir estos manuscritos que paso a compartir.

I

Nombres de cuerpos
rotundos y silentes
absortos marchan
hediondos sepultados
inhalan materias
celestes, azules y blancas
ayunan cenizas amargas
verso en prosa, verso
perdido en el tiempo
mínimo en lo extenso
pálida del huido
en tiempo del tiempo

II

Inunda mi cuerpo asqueroso
sabores insípido alcoholizado
minucias salidas del pecho
mucosas de sienes albas
añoro mi norma libre
olvidada en los progresos
tomados de la boca del lobo
todos comiendo pasto
clavi mis dientes, te clavo la frente
solo, sin amo, rabioso, hediondo
sacudo mi pene en son
de desgracia primitiva
desgracia de no tener
carne en el plato de comida.

Espectros

Termitas sobre las paredes
opacos espacios referentes
fieles a las gráciles hedas
caigo como un papel en el lodo
hinchado de dolores fecundo
cada parte de tu condena

haciendo trizas el miembro
que te alimenta y regocija
venganza como paga por servir
te desquicio y miro tus ojos
y veo atravéz de ti: carne

Es el segundo, otro cortito que tengo para la distracción de las mentes, solo un detalle para engañar la mente. Asi no tenemos que olvidarnos entre nosotros.

Ofrendas subcutaneas

Cumpliste fielmente tu promesa
rasgaste todas las vestiduras
y saliste desnuda ante esa cálida
pero penetrante mirada ajena

Deseché todo cuanto pude de ti
esa amarga música aun rebota
como olas en los roqueríos
con fuerza, con venganza

aun en la calle te veo como a otra
sin verdad pero translucida
tan solo andas con paso corto
la edad ahora es una carga mas

Alguna vez intente perseguirte
tu fineza era la misma de siempre
como si danzaras con los ojos cerrados
como una grácil hoja al vaivén del viento
en el medio de la tormenta
te escabulliste en el océano de cemento

Rígido

No hay nada que pueda hacer
estéril mi mirada atónita
contempla ese jugo divino
cascadas de placer brotan
y tu entrepierna volatiliza
todos los deseos húmedos

No aparto la vista de tus labios
me cansé de luchar. Cedí
frívolo y tieso cedo a tus caprichos
duro como roca me dejo caer
para sucumbir iluso
a tu carne ácida que acaricia
con frenética delicadeza mi cara.

Contenerme, fugaz intento
con calma me llevaste rápidamente
hasta tu valle frondoso
donde llené tus vientres siniestros
y perecí junto con el alba

Carajada.

Descalza camina sobre los vidrios de mi boca
añora escupir valores exhaustos sangrientos
impaciente aguarda la basura que se arroja
tras las estelas frías de agua y veneno dulce

Salpica las esencias añejas en formol
hundiendo los dientes espera paciente
escapar soltando mis amarras laterales
auscultando comportamientos parásitos
desagües del pensamiento podrido
que unto en tu boca para alimentarme

Nacimiento prematuro

Rompí el silencio con mis manos
con el codo, con los ojos
rompí tu cara, no lo entiendo
si tanto dije quererte
interrumpir mi trance fue lo peor
el caminante se hizo mio
mi cuerpo ahora yace trizado
reflejado en el aire

Convenciones

mientras tu haces lo que se te place
no me atormentare por tus mentiras
esas que traen flores soles y miel
pretender que eres otra y me amas
partir expulsado del paraíso

Si de las estrellas bajaran ángeles
dudaría de la creencia popular
te abrazaría hasta el ahogo
volvería a ser el mismo aquel
crucificado en el muro perpetuo
adornado con coronas opalescentes

No creerías si te dijera cuanto te odio
bajo el agua no te encuentras sola
las olas rebotan en mi cara
tal como lo hacían tus pechos
abrupto dolor que empeora
saliente del sol y las arenas del aire

cabalgo en mis hombros secretos
infinitos papeles que lubrican
hermafroditas en celo que copulan
al ritmo de los latidos del corazón
hubiera sido mejor que nos abrazáramos